PÍldoras
de conocimiento
Redes sociales y coronavirus
El consumo de las redes sociales en España aumentó un 55% en el inicio del confinamiento. Un dato esclarecedor del poder de atracción de las redes sociales en nuestro país que ya era contrastable en años anteriores. Somos adictos a ellas y, ahora, su influencia ha aumentado aún más, en especial en Twitter.
Este aumento del consumo de información a través de las redes sociales ha puesto de manifiesto aún más un fenómeno del que ya os hablábamos en otra píldora: “¿Nos desinfoxicamos?”
En estos momentos en que se está librando una batalla sanitaria y que, más que nunca, es fundamental seguir la información de fuentes contrastadas y medios oficiales, también se está haciendo un esfuerzo importante contra el aumento de las fake news en redes sociales en relación al Covid-19. Como botón de muestra, dos ejemplos; por un lado, que los ministros de exteriores de la UE trabajan, entre otros aspectos, en combatir la desinformación, y, por otro lado, las propias redes sociales, con el ejemplo de Instagram, que ha decidido dejar de recomendar publicaciones sobre el coronavirus. Así que en esta marea informativa que nos movemos no resulta sencillo abstraerse del ruido informativo ya sea en Facebook, Twitter o Instagram.
Y en ese océano social queremos rescatar la solidaridad que en cuanto se organiza es capaz de sacarnos al balcón cada día a las 20:00 horas a través del #aplausosanitario o desarrollar iniciativas de sectores tan dispares como el gastronómico, a través de #cocinemosjuntos, o el fomento de la lectura con #yomequedoencasaleyendo. Sin olvidarnos de preciosas iniciativas locales como las mascarillas solidarias de costureras vitorianas o, makers alaveses fabricando viseras protectoras para el personal sanitario.
Todo parece indicar que las redes sociales viven una época de renacimiento ante la situación excepcional que estamos viviendo. Sin embargo, que la audiencia se haya disparado, no ha significado que el modelo de negocio de Twitter haya mejorado. Por ello, surgen dos interrogantes: ¿Veremos unas nuevas redes sociales cuando la crisis del Covid-19 haya terminado? Y, por otro lado, ¿seremos capaces como ciudadanos de desinfoxicarnos definitivamente?
Créditos de la imagen: Photo by dole777 on Unsplash
